SÉPTIMA PARTE
NADA NI NADIE ME PODRÁ SEPARA DE TU AMORLUCAS 8 23-25
Jesús calma la tempestad
(Mt. 8.23-27; Mr. 4.35-41)
22 Aconteció un día, que entró en una barca con sus discípulos, y les dijo: Pasemos al otro lado del lago. Y partieron.
23 Pero mientras navegaban, él se durmió. Y se desencadenó una tempestad de viento en el lago; y se anegaban y peligraban.
24 Y vinieron a él y le despertaron, diciendo: !!Maestro, Maestro, que perecemos! Despertando él, reprendió al viento y a las olas; y cesaron, y se hizo bonanza.
25 Y les dijo: ¿Dónde está vuestra fe? Y atemorizados, se maravillaban, y se decían unos a otros: ¿Quién es éste, que aun a los vientos y a las aguas manda, y le obedecen
NI AUN EN LAS PEORES TORMENTAS , TU NOS ABANDONAS , TU ESTAS AHÍ . CALMANDO LOS VIENTOS FUERTES , QUE QUIEREN SACARME DEL CAMINO , TODA TEMPESTAD QUE SE QUIERA LEVANTAR EN CONTRA MÍA , NADA , NADA ME PODRÁ SEPARAR DE TU AMOR
NI AUN CUANDO YO ME DEBILITARE , NI AUN ASÍ TU MANO ME SOSTENDRÁ , NO ME SOLTARA
AUNQUE ESTE EN LA TORMENTA MAS FUERTE, TU PODER Y TU GLORIA SE MANIFESTARA PARA SALVACIÓN , NINGUNA TORMENTA PODRÁ SEPARARME DE TU GRAN AMOR
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